Ahora tienes una herida traumática o quirúrgica que curar. Puede que esté en un lugar del cuerpo no tan escondido. ¿Quizá en tu rostro? Todo lo que esperas es que no deje cicatriz. ¿Pero sabes cuáles son los pasos para lograrlo? Sí, como lo oyes, una curación sin cicatriz. ¡Es posible! Especialmente si lo que tienes es una herida cotidiana, menor.


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¡Hola a todos! Hablemos de cómo curar nuestras heridas para que no dejen una cicatriz externa. Incluso si no tienes una herida o cicatriz reciente en este momento. Así, la próxima vez sabrás exactamente qué hacer y no caerás en los mismos errores pro-cicatriz una vez más – sí, todos los hemos cometido alguna vez –.

¿Qué pasa en tu piel cuando ocurre una herida?

Reparación versus regeneración cutánea

Cuando tenemos una herida en la piel, nuestro cuerpo trata de reparar el tejido dañado lo antes posible. Es una respuesta de supervivencia que no es perfecta y que deja una cicatriz (incluso si no la ves externamente).

Sin embargo, sabemos que la curación sin cicatriz es posible, ya que sucede en el feto en las fases tempranas del embarazo. En esa situación, lo que ocurre no es una respuesta de reparación del tejido sino una respuesta de regeneración tisular en su lugar. La última conlleva una reacción mucho menos abrupta que resulta en una pieza nueva de tejido, sin rastro de cicatriz.

Regeneración versus reparación de heridas cutáneas (ilustración): la regeneración del tejido no genera cicatriz mientras que la reparación del mismo sí da lugar a una cicatriz.

Tanto los productos más simples para el tratamiento casero de cicatrices como las más sofisticadas estrategias biotecnológicas con el mismo propósito tratan de simular la respuesta de regeneración tisular y la curación sin cicatriz 1 que sucede en el feto. Y eso mismo queremos imitar (en la medida de lo posible) cuando surge una herida en la piel en nuestro día a día.

Etapas de la reparación de una herida

Ya sabemos que es posible conseguir una cicatriz aparentemente inexistente tras una lesión. Veamos entonces cuál es la cascada de eventos moleculares del proceso de curación de heridas y cómo favorecer la “cicatriz-no cicatriz”. Existen cuatro etapas que podemos optimizar desde fuera.

Etapa 1 – Coagulación

Cuando nos hacemos, por ejemplo, un corte, lo primero que sucede es que algunas plaquetas pasan desde el torrente sanguíneo hasta el sitio del corte y se agregan con la proteína fibrina para formar un coágulo. El último tapona la herida e impide la infiltración de suciedad y microorganismos en la misma.

Primera etapa de la curación de heridas cutáneas: coagulación (ilustración).

Etapa 2 – Inflamación

Las plaquetas y las células cutáneas en la zona de la lesión secretan factores de crecimiento solubles (como PDGF, el Factor de Crecimiento Derivado de Plaquetas) y citoquinas, moléculas que atraen células del sistema inmune a la herida.

Es entonces cuando neutrófilos y macrófagos entran en la herida para matar bacterias, deshacerse de deshechos y dar comienzo a una respuesta inflamatoria que inducirá la recuperación y remodelación del tejido dañado.

Por lo tanto, moléculas y células pro-inflamatorias (como los macrófagos M1) se requieren al comienzo de esta etapa. En cambio, para progresar óptimamente a la siguiente fase de la curación y disminuir las probabilidades de que quede una cicatriz visible, el proceso de inflamación tiene que parar.

Para ello, células y moléculas anti-inflamatorias sustituyen las células y elementos pro-inflamatorios tempranos en una fase más avanzada de la etapa de inflamación. Por ejemplo, los macrófagos M2 (o macrógagos anti-inflamatorios) secretan la citoquina anti-inflamatoria IL-10 (interleuquina-10) en el sitio de la herida antes de pasar a la siguiente etapa.

Segunda etapa de la curación de heridas en la piel: inflamación (ilustración). Los neutrófilos y macrófagos M1 se deshacen de bacterias y debris en la fase temprana de inflamación. Durante la fase tardía de la etapa de inflamación los macrófagos M2 secretan moléculas anti-inflamatorias.

El sello distintivo de la curación sin cicatriz es la presencia de una inflamación reducida. Por ello, debemos hacer todo lo posible para mantener el estadio pro-inflamatorio al mínimo. De este modo, es mucho más factible que acabemos con una cicatriz invisible. Luego veremos exactamente cómo lograrlo 🙂 

Etapa 3 – Proliferación

Ahora es el momento de arreglar o, idealmente, regenerar la dermis en la herida (ésta sustituirá al tapón de fibrina). Las moléculas secretadas por los macrófagos y otras células durante la etapa de inflamación inducen inicialmente la proliferación de fibroblastos (las células de la dermis). Al tiempo que se multiplican, éstos también sintetizan y secretan colágeno III para rellenar la herida con lo que se conoce como tejido granular (un tejido transitorio).

Etapa IIIde la curación de heridas cutáneas: proliferación (ilustración). Se forma el tejido granular en la sitio de la lesión,y los nuevos fibroblastos sintetizan colágeno de tipo III.

Es mucho más probable que la proliferación de fibroblastos en esta etapa ocurra de forma adecuada si las células y moléculas pro-inflamatorias no dominan la etapa de inflamación previa.

Ello es de extrema importancia, ya que una de las claves para evitar una cicatriz visible es que esos fibroblastos no proliferen demasiado ni produzcan cantidades excesivas de colágeno. De otro modo, terminaríamos con una cicatriz no tan bonita, o incluso con una desagradable cicatriz hipertrófica o queloide.

Una vez que la dermis se rellena con el tejido granular, los queratinocitos (las células de la epidermis) proliferan y migran para cerrar la superficie de la herida, lo que se conoce como proceso de re-epitelización.

Etapa 4 – Remodelación

En esta última fase (que puede durar desde meses hasta un año, aproximadamente), el tejido granular se remodela para dar lugar a un tejido más robusto, similar a la piel original.

Para ello, el colágeno I (el tipo de colágeno más abundante en la piel) reemplazará al colágeno III anteriormente depositado en la herida. El colágeno I es más rígido que el colágeno III. Como resultado, a pesar de que el colágeno III es más blando, un exceso del mismo durante la fase de formación del tejido granular derivará posiblemente en una cicatriz excesiva y rígida al final. 

Etapa IV de la curación de heridas cutáneas: remodelación (ilustración). Enzimas remodelantes (MMPs) actúan en el sitio y el colágeno III es sustituído por el colágeno I, dando lugar a la cicatriz final.

Pasos prácticos para un look sin cicatriz (o cómo curar una herida de forma óptima)

En base a todo lo anterior, existen cuatro requerimientos clave en el cuidado de las heridas para conseguir una cicatriz no visible.

1· Mantente alejado de las infecciones

En otras palabras, mantén tu herida limpia. Una vez que la lesión ocurre, límpiala bien con abundante agua y aplica presión si es necesario hasta que pare de sangrar. Entonces retira cualquier resto de suciedad (si queda alguno) con, por ejemplo, pinzas esterilizadas.

Solo si es necesario, utiliza un jabón suave para limpiar la herida. Y límpiala cada día, al menos hasta que la superficie de la herida se cierre. Una eventual infección conllevaría inflamación adicional. ¡Y ya sabes que esa inflamación no te ayudará a disminuir la cicatriz!

También puedes utilizar una solución o spray de ácido hipocloroso para minimizar el riesgo de infección sin irritar la herida o fomentar un exceso de cicatrización. El ácido hipocloroso no es tóxico (puedes comprarlo en la farmacia). Algunas células de nuestro sistema inmune cutáneo, como los neutrófilos, producen este ácido para matar patógenos de forma rápida.

Yo me di cuenta de que el ácido hipocloroso era efectivo para tratar heridas cuando tuve blefaritis (una inflamación de los párpados). Entonces rociaba la superficie de mis ojos con ácido hipocloroso para evitar la proliferación de microorganismos indeseados en la zona (puedes ver el producto que usé debajo; se puede comprar sin prescripción médica).

Ocudox Solución Electrolizada (Brill Pharma)

2· Asegúrate de que la herida permanece hidratada

En los primeros estadios fetales – cuando ocurre la verdadera curación sin cicatriz – existen niveles más altos de Ácido Hialurónico de Alto Peso Molecular en la zona de la lesión.

Aparte de tener carácter anti-inflamatorio, esas moléculas grandes de ácido hialurónico unen y retienen grandes cantidades de agua dentro de la herida. Esa hidratación estimula una mejor proliferación y migración celular. Y, por tanto, una mejor formación de tejido granular y re-epitelización.

Por el contrario, el Ácido Hialurónico de Bajo Peso Molecular, que está presente en las heridas después del nacimiento, es pro-inflamatorio. Así que es crucial contrarrestar su efecto manteniendo una correcta hidratación de la herida.

Para mantener la piel hidratada tras de limpiar la lesión y en los días posteriores, lo mejor es sellar la herida, por ejemplo, con gel de silicona o parches del mismo material. Los parches de silicona pueden ser irritantes para algunas personas (especialmente en esta etapa tan temprana de la curación); si eso ocurre, usa mejor el gel de silicona (o simplemente vaselina pura, sin perfume a ser posible).

Mis parches de silicona.
Parches de silicona.

En esta fase, también puedes usar pomadas cicatrizantes a base de ingredientes humectantes como ácido hialurónico, glicerina, o sorbitol (puedes encontrarlos en cualquier farmacia; mira un ejemplo debajo). No obstante, éstos no sellarán la herida como lo hace el gel de silicona.

Mi pomada cicatrizante a base de ingredientes humectantes (puedes encontrar otras similares en cualquier farmacia).
Pomada a base de humectantes cutáneos.

Un error común es limpiar la herida con alcohol. El alcohol deshidrata la piel. Y, en consecuencia, el tratamiento de una herida con alcohol dejará probablemente una cicatriz no muy agradable. El agua oxigenada (peróxido de hidrógeno) en general tampoco es la mejor opción. Es mejor adherirse a la limpieza con agua (o agua y jabón suave) para la limpieza diaria de la lesión.

3· Evita el incremento de la inflamación

Esto significa que debes hacer un esfuerzo por no alterar a la herida, de modo que esos fibroblastos y queratinocitos puedan hacer su mejor trabajo para restaurar tu piel maravillosamente.

Yo dejaría a un lado cualquier sustancia potencialmente irritante. Además, es mejor evitar tocar la herida o cualquier esfuerzo físico que pueda dañar su integridad.

Los nuevos queratinocitos migrarán sobre la superficie de la herida durante la etapa de proliferación, y cerrarán la misma antes de la fase de remodelación (en ese momento se caerá la costra o tapón de la herida, si es que existía). Hasta que esto ocurra, no es necesario cubrir la lesión (con una tirita, por ejemplo), pero puedes hacerlo si está en un lugar donde se molestará fácilmente.

Cuando la costra (si hay) se caiga podrás utilizar parches reductores de cicatrices. Yo tengo una pequeña cicatriz en mi frente resultante de una herida que me hice el pasado abril, y justo cuando la costra se cayó empecé a usar parches de poliuretano (de Trofolastin, ver debajo). Los mismos actúan de diferentes formas para disminuir la cicatriz. Detallaré esto después 😉

Por ejemplo, tienen un Factor de Protección frente a la Luz Ultravioleta (UPF) de 50+ y protegen la marca de la radiación solar, lo que es crítico para mantener la inflamación al mínimo.

Trofolastin: parches reductores de cicatrices de poliuretano.
Mis parches reductores de cicatrices de poliuretano.

Cuando la herida esté cerrada también puedes empezar a aplicar cremas más o menos densas para ayudar a que la piel esté hidratada y se recupere. No necesitas romperte la cabeza buscando los mejores ingredientes. Los ingredientes activos más beneficiosos para esto son simples, efectivos, y clínicamente probados:

– humectantes cutáneos: probablemente el mejor sea la glicerina;

– ingredientes botánicos con propiedades regeneradoras. Yo destacaría los siguientes.

La Centella asiatica (también conocida como Gotu kola) es un ingrediente de primera categoría para las cicatrices.

Puedes verlo con cualquiera de esos nombres. También puedes encontrar algunos de sus ingredientes beneficiosos de forma aislada (por ejemplo, Asiaticoside, Madecasosside, Ácido Asiático, o Ácido Madecásico). Un buen producto con Centella asiática que puedes usar es el bálsamo Cicaplast B5 de La Roche Posay.

El té verde (Camelia sinensis) es otro ingrediente que puede ayudar a minimizar la cicatrización.

Puedes encontrar también Epigalocatequina galato (EGCG) – una de las moléculas más beneficiosas del té verde – entre los ingredientes de algunos productos.

La Solución para Cicatrices (Solution for Scars) de Science of Skin (una marca británica) tiene té verde. No he probado este producto pero parece una buena opción: lo desarrolló un cirujano que necesitaba una solución para minimizar las cicatrices quirúrgicas. En cualquier caso, también puedes encontrar otros productos con cantidades razonables de té verde (o sus componentes).

Solution for Scars de Science of Skin está clínicamente probado para la mejora del aspecto de cicatrices.  Contiene extracto de té verde.
Solution for Scars de Science of Skin contiene extracto de té verde.

4· Optimiza el andamiaje de la herida

Y dirás, ¿qué significa esto? 😉 Quiere decir que es mejor disminuir la carga mecánica en la lesión. ¿Por qué y cómo?

Las propiedades de la matriz extracellular dérmica en el sitio de la lesión tienen un impacto directo sobre cómo será la cicatriz resultante. Las proteínas (como la elastina), glicosaminoglicanos (como el ácido hialurónico) y otros componentes de la matriz extracelular actúan no solo como andamio en el proceso de reparación. Además, los mismos son capaces de detectar fuerzas físicas (como presión) en el sitio de la herida y transmitir esas señales a las células que reparan el tejido cutáneo.

Si los componentes de la matriz extracelular perciben demasiada presión, éstos activan receptores celulares (por ejemplo, receptores llamados integrinas). Y los últimos inducen respuestas celulares en respuesta a esa presión excesiva. Por ejemplo, un incremento de la inflamación, la sobreproducción de colágeno o una remodelación del tejido inadecuada. Y ya sabemos que estas respuestas pueden resultar fácilmente en una cicatriz más inestética.

Los parches reductores de cicatrices (como los parches de poliuretano que mencioné antes) alivian la presión excesiva en la lesión y, en consecuencia, facilitan mejores interacciones entre las células y la matriz extracelular y una adecuada restauración de la misma. Esto resulta en una cicatriz menos visible.

Desde mi punto de vista, los mencionados parches marcan la diferencia. Yo definitivamente los usaría si observas que la cicatriz toma una apariencia extraña después de la re-epitelización o cierre de la herida (ello puede ser una señal temprana de una cicatriz hipertrófica o queloide).

La disminución de las fuerzas mecánicas en el sitio de la lesión reduce la cicatriz (ilustración).

Yo sigo usando los parches reductores de cicatrices de Trofolastin sobre la pequeña cicatriz de mi frente cuando estoy en casa (justo después de que la costra se cayera los llevé la mayor parte del tiempo durante más de tres meses). Continuaré utilizándolos hasta que haya pasado un año (es decir, hasta abril).

Pasos adicionales y efectivos para borrar una cicatriz

Es posible mejorar la apariencia de una cicatriz, tanto si es reciente (menos de un año) como antigua. Los parches reductores de cicatrices quizá puedan ayudar con cicatrices mayores de un año, pero no serán tan efectivos – puedes probarlos y ver qué pasa.

Junto con los parches reductores de cicatrices, yo aplicaría de forma consistente un tratamiento dual con dos tipos de ingredientes activos: retinoides y exfoliantes químicos (alfa- y beta-hidroxiácidos). Recuerda que cuanto más reciente sea la marca, mejores y más rápidos serán los resultados. No obstante, las cicatrices más antiguas también se beneficiarán de este tipo de tratamiento.

Los retinoides (como el retinol, el retinal o el ácido retinoico) desencadenarán una renovación epidérmica más ordenada y rápida. Es por ello que, después de un tiempo, verás la superficie de la piel más uniforme y menos pigmentada. Los retinoides también estimulan la producción de colágeno en la dermis, lo que favorecerá una adecuada remodelación de la misma y la disminución de la marca. Así que, si tu piel tolera los retinoides, yo no dudaría en utilizarlos.

Si ya tienes experiencia utilizando retinol, te sugiero los siguientes productos con retinal (el retinal es más potente que el retinol) de la marca Geek & Gorgeous, que están disponibles en dos concentraciones diferentes:

Geek & Gorgeous A-Game 5

Geek & Gorgeous A-Game 10

Funcionan bien y tienen una textura no grasa.

Mis productos con retinal de Geek & Gorgeous. Vienen en una conveniente bomba opaca y airless (sin aire).

Productos con retinal de Geek & Gorgeous. Vienen en una conveniente bomba opaca y airless (sin aire).

Si no estás familiarizado, puedes echar un vistazo a mi artículo Arranca tu rutina con retinoides para introducirte en el mundo de los retinoides.

Los alfa y beta hidroxiácidos son exfoliantes químicos que te ayudarán a pulir la superficie de la piel y mantenerla más hidratada. Pueden suavizar cualquier línea o marca y aclarar la hiperpigmentación post-inflamatoria (si es que tienes alguna). Además, incrementan los beneficios de tu crema hidratante y de cualquier ingrediente adicional que puedas estar aplicando sobre la cicatriz (como la centella asiática).

Si tu piel no tiene problema para lidiar con el ácido glicólico, yo te recomiendo este alfa hidróxiácido como primera opción para el tratamiento de la cicatriz. Es más pequeño que otros ácidos exfoliantes y más efectivo. Por ejemplo, puedes utilizar esta solución de Neostrata: es una solución alcohólica que no reseca y da buenos resultados (yo la uso).

Solución de Neostrata con 15% de ácido glicólico.
Mi solución de Neostrata con 15% de ácido glicólico.

Si tienes una hiperpigmentación post-inflamatoria relevante, los retinoides y los exfoliantes químicos pueden no ser suficientes para hacerla desaparecer. Esto ocurre muy frecuentemente en tonos de piel más oscuros. En ese caso puedes probar ingredientes activos como la hidroquinona, el ácido tranexámico o el ácido azelaico. Los mismos reducen la producción excesiva de melanina. La hidroquinona normalmente requiere prescripción médica. Para saber más sobre el ácido azelaico, puedes echar un vistazo a mi reciente artículo sobre el mismo aquí.

Yo comenzaría con los alfa hidroxiácidos y los retinoides (puedes utilizarlos en noches alternas, por ejemplo). E introduciría después cualquier ingrediente despigmentante (por ejemplo, después de una o varias semanas). Si cualquier ingrediente (los mencionados anteriormente u otros) irrita tu piel excesivamente, deja de usarlo.

Si, después de todo, no estás contento con el aspecto de la marca (si es que queda alguna) puedes probar un tratamiento con láser (laser skin resurfacing). Esto será más costoso, pero valdrá la pena si la cicatriz te molesta.

Espero que te haya gustado este artículo.

¿Tienes cicatrices?

¿Has utilizado algún tratamiento para tratar de eliminarlas?

¡Comenta debajo! También puedes seguirme en Instagram (@drmariamonterrubio).

Un abrazo, 

María

Para tu referencia:

1 Regenerative scar-free skin wound healing. Monavarian M et al., Tissue Eng Part B Rev, 2019; 25 (4): 294-311.

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